Barcelona

Satan's Coffee Corner puede resultar algo pequeño, pero no le falta un ápice de personalidad ni de fidelidad por parte de su clientela. Su propietario, Marcos Bartolomé, pertenece a una familia de cafeteros, y es en este lugar donde comenzó a realizar sus propias mezclas de forma original y creativa, que posiblemente constituyan los mejores cafés de la ciudad.

Conocido por su exquisita y variada oferta de cócteles y su decorado con un encubrimiento de madera que lo dota de un ambiente relajado, el Café Salambo atrae a un público joven y dinámico que acude a picar algo antes o después de ir al cercano cine Verdi.

El Magnífico – el nombre está a la altura de su calidad – es una casa de elaboración y tueste de café de alta gama, que ofrece a sus clientes la posibilidad de “catar” los distintos tipos de café y sus mezclas especiales en un espacio dedicado a tales efectos, antes de decidir si comprar el producto o no. Muchos clientes terminan llevándose los granos más selectos, lo que da fe de su alta calidad y magnífico sabor.

Los cafés tradicionales de Barcelona se conocen también como “granjas” y Viader es posiblemente una de las más famosas. En efecto, esta granja continúa siendo, tras todos estos años, un lugar excelente donde paladear el delicioso cacaolat, ese batido de chocolate con leche de confección catalana, siempre acompañado por unos buenos churros. El lugar rebosa de encanto y personalidad gracias a una clientela y un personal que, a partes iguales, garantizan un ambiente siempre animado.

Ofreciendo una gran cantidad de dulces, golosinas y pasteles, Caelum tiene como objetivo satisfacer hasta a los más exigentes amantes de los dulces. Los productos que ofrecen son hechos por monjes y monjas en varios monasterios y conventos situados alrededor de la región, y se pueden disfrutar junto con un café humeante en la pequeña área de la cafetería de la tienda.